El logotipo; el símbolo de cualquier organización y de cualquier despacho
¿Se imagina una empresa sin logotipo, sin sus colores o sin su nombre comercial? Efectivamente es muy importante que su despacho u organización tenga una identidad visual; ayuda a distinguirla entre las demás, a recordarla, a hacerla más familiar o cercana, y a transmitir una idea clara de qué es.
Hay muchos tipos de símbolos: logotipos, isotipos, imagotipos, isologos, sin bien comúnmente la hemos unificado bajo la palabra logotipo. El proceso creativo de un logotipo es complejo, y requiere conocer en profundidad la identidad de esa marca, es decir, sus valores, sus creencias y su forma de actuar.
Actualiza tu imagen de marca
Todo lo que hagamos y comuniquemos habla de nosotros como profesionales, como despacho, como organización. Lo que proyectamos constituye nuestra imagen pública. Y puesto que todo comunica, lo conveniente es que todos nuestros mensajes sean coherentes con un objetivo estratégico. Se hace necesario, entonces, tener claro cual es nuestra identidad corporativa: quienes somos, nuestra razón de ser, nuestros valores, creencias, objetivos, nuestra forma de actuar, nuestras debilidades y puntos fuertes. Nuestra identidad transmite información a la audiencia, que aspira a identificarse con nosotros antes de contratarnos.
El logotipo, en todas sus tipologías, es la grafía de una marca. Es lo primero que recordamos, y su función es conseguir que se perciba la diferencia de una marca respecto todas las demás. Hacer un buen logotipo, o realizar una actualización de uno ya existente, lleva tiempo. Antes de iniciar el proceso creativo, os tenemos que conocer, nos tenemos que convertir en expertos en tu despacho.
¿HABLAMOS?
Lo mejor es que hablemos; que nos expliques lo que crees que necesitas y tu visión, y nosotros te mostraremos lo qué se puede hacer y cómo lo hacemos.